Día de la Independencia

Hoy es el turno de mi bella y lejana Colombia para celebrar su fiesta nacional, el día de la Independencia.

El 20 de julio fue decretado como el día de la fiesta nacional aunque la Independencia se haya logrado unos cuantos años más tarde. ¿Pero por qué haber escogido una fecha anterior? La razón es algo anecdótica. El 20 de julio de 1810, los habitantes de Bogotá lograron sublevarse contra el reino español y todo eso gracias a un florero que un distinguido señor se negó a prestar a los criollos. La historia termina con el dichoso florero roto, los españoles contrariados y los criollos listos para años de lucha por el anhelado sueño de emancipación.

Para esta ocasión, preparé un brazo de reina con los colores de mi Colombia.

El brazo de reina, brazo de gitano o Pionono es un postre muy popular en Sudamérica, en especial en Argentina, Colombia, Perú y Venezuela. Se acostumbra rellenarlo de dulce de leche, de mermelada o de crema chantilly.

La receta que les presento es la receta de mi abuela que encontró en el “Gran libro de la cocina colombiana”. Como hago usualmente con todas las recetas, la hice en varias oportunidades para experimentar y presentar el resultado que más me ha gustado.

Para su elaboración, es necesario hacer un bizcocho simple con huevos. No obstante, lo más importante es de empezar a enrollarlo apenas salga del horno para que luego se nos haga más fácil decorarlo.

Los ingredientes son muy fáciles de encontrar en cualquier cocina. Mi receta lleva una crema con queso mascarpone pero se puede reemplazar por una crema chantilly. Además, le puse un poco de dulce de leche y unas cuantas fresas cortadas en trocitos. Por otra parte, utilicé colorantes artificiales en pasta para darle color a la masa y hacer la bandera. Esto es totalmente opcional.

Importante: cuando hablo de tazas para medir los ingredientes, me refiero a las tazas medidoras americanas. No hay que medir las cantidades con tazas de café comunes porque estas tazas medidoras o “cups” son una especie de sistema métrico que se usa cotidianamente en américa. Sin embargo, busqué las equivalencias en gramos para facilitar la tarea.

Brazo de reina o Pionono

Ingredientes para el bizcocho:

-5 huevos

-1 taza de harina (125 g)

-1 taza de azúcar (250 g)

-1 cucharadita de polvo para hornear

-1/2 cucharadita de sal

-1 cucharadita de esencia al gusto

-Colorantes amarillo, azul y rojo

-3 mangas pasteleras o bolsas de congelación

1. Precalentar el horno a 200ºC. Engrasar una placa del horno y cubrirla de papel para hornear.

2. En un bol, mezclar la harina, el polvo para hornear y la sal. Cernir y reservar.

3. Separar las claras y las yemas de los huevos.

4. Batir a la mano o con el batidor eléctrico las yemas y la mitad del azúcar hasta que blanqueen. Reservar.

5. Con la batidora eléctrica o el robot, montar las claras a punto de nieve con la otra mitad de azúcar.

6. Agregar la mezcla de yemas y azúcar. Batir a velocidad baja. Poner la cucharadita de extracto.

7. Añadir la mezcla de harina en tres veces. Ir mezclando con la ayuda de una espátula. Verificar que no quede harina asentada en el fondo del bol.

8. Dividir la mezcla en tres tazones y agregar los colorantes artificiales. Mezclar uniformemente. Llenar las mangas pasteleras, asegurarlas con una pinza y dibujar la bandera sobre la placa del horno previamente engrasada. Si no se dispone de mangas pasteleras, se puede usar bolsas para congelar siempre y cuando se aseguren bien con una pinza o un caucho elástico.

9. Hornear durante 10 minutos. Verificar que el bizcocho esté listo con la ayuda de un palillo.

10. Una vez fuera del horno, poner una hoja de papel de hornear sobre el bizcocho al igual que una rejilla grande. Voltear la placa con cuidado para desmoldar el bizcocho y ponerlo con la rejilla sobre el mesón de la cocina. Protegerse con unos guantes porque la placa está todavía caliente. Desprender delicadamente el papel de hornear sobre el cuál se cocinó el bizcocho y quitar la rejilla. Con ayuda del papel de hornear que quedó debajo, enrollar delicadamente el bizcocho y dejarlo enfriar por completo en esta posición. Hay que hacer todo esto con el bizcocho caliente porque tiende a volverse quebradizo conforme y se va enfriando.

Ingredientes para el relleno:

Con crema de mascarpone

-225 g de mascarpone

-120 g de crema para batir o nata para montar (con al menos 30% de materia grasa)

-113 gr de azúcar glas

-1/2 cucharadita de extracto al gusto.

1. La crema y el mascarpone deben estar bien fríos.

2. Poner el mascarpone y el azúcar glas en un bol y batir a velocidad alta.

3. Agregar el extracto e ir batiendo lentamente. Poner la crema e ir aumentando la velocidad hasta obtener un chantilly.

4. Dejar enfriar en la nevera durante una hora.

Con crema chantilly

-500 gramos de crema de leche o nata para montar

-60 gramos de azúcar glas

1. La crema de leche deben estar bien fría.

2. Poner la crema de leche en un bol y comenzar a batir con la batidora eléctrica a velocidad media hasta la obtención de una consistencia firme y cremosa.

3. Comenzar a agregar el azúcar glas sin dejar de batir para evitar que la crema se caiga. Agregar media cucharadita de extracto al gusto.

4. Dejar enfriar en la nevera durante una hora.

Para el montaje:

1. Desenrollar delicadamente el bizcocho una vez se haya enfriado por completo. Untar dulce de leche al gusto. Si el dulce de leche está un poco duro, ponerlo 10 segundos en el horno microondas para que sea más fácil esparcirlo.

2. Esparcir la crema chantilly o la crema de mascarpone. Evitar los bordes para que no se salga al momento de enrollar el bizcocho. Alisar bien con una espátula.

3. Poner unos 150 gramos de fresas frescas cortadas en trocitos. Enrollar bien con la ayuda del papel de hornear y dejarla en la nevera hasta el momento de servir.

4. Quitar el papel de hornear y cortar los bordes para una mejor presentación.

Y he aquí mi bella bandera, lista para degustar con un buen café colombiano.

Feliz día de la Independencia a todos los colombian@s.

Fiesta Nacional: 14 de julio

¡Hoy mi querida Francia celebra su Fiesta Nacional! El país entero conmemora la Toma de la Bastilla y la Revolución francesa, inspiración de todas las revoluciones posibles.

Sin embargo, no los voy aburrir con la historia del 14 de julio. Creo que a todos nos dieron una buena dosis en el colegio. Pero lo que si les quiero describir, es cómo se celebra en Francia este día tan especial. 

Cada ciudad, por más pequeña, tiene un lindo espectáculo de fuegos artificiales y se realizan fiestas populares. El espectáculo pirotécnico en París es hermoso, con la Torre Eiffel como telón de fondo. En la capital, el día comienza con el famoso desfile militar a través de los Campos Elíseos y se termina con las fiestas populares de barrio. Las más famosas son las que realizan los bomberos, los llamados “Bals des pompiers”. Cada estación de bomberos realiza una fiesta para recoger fondos para su manutención y cualquier persona puede participar, a condición de hacer una fila larguísima. Recuerdo haberla hecho con unos amigos y nos cansamos tanto de esperar que decidimos ir a festejar más bien en un restaurante.

Es un día de fiesta y de orgullo para cada francés que lo celebra, así se encuentre al otro lado del mundo. Y para este ocasión, he querido hacer algo que encuentro muy francés. Bueno, quizá sea algo que me parecía muy francés cuando era más jovencita:

Recuerdo que cada vez que le sobraban claras de huevo a mi abuela, ¡éramos los niños más afortunados porque nos hacían merengues!

Creo que todos tenemos buenos recuerdos de los merengues. Y es que son una delicia.

Claro, al crecer me he dado cuenta de que no existe un sólo tipo de merengue, el francés, sino también el merengue suizo y el italiano. Por supuesto, les voy a compartir mi versión del merengue francés para hacer honor a este 14 de julio.

Primero, unas cuantas indicaciones importantes:

-Lavar bien los utensilios y el bol en el que las claras van a ser batidas. El merengue no se lleva bien con la grasa y cualquier partícula grasosa impide que las claras se monten a punto de nieve. Lo que yo hago es lavar bien todo con agua caliente, jabón y vinagre. Seco bien con un paño limpio y listo.

-Al separar las claras de las yemas, evitar que queden restos de éstas últimas. Las yemas también impiden que las claras monten más fácilmente.

-Pueden usar una batidora eléctrica manual o un robot de cocina con las aspas en forma de mariposa.

-Encontrarán que en la receta uso crémor tártaro pero lo pueden sustituir por unas gotitas de limón o de vinagre. El crémor tártaro es una especie de sal ácida que ayuda a estabilizar las claras de huevo, es decir, para que suban más firmes y no tiendan a caerse. Antes era difícil de conseguir, pero ahora se puede comprar en tiendas de repostería y hasta en supermercados, y saca de apuros si no se tiene limón o vinagre a la mano.

-Salen unas tres docenas de merengues por horneada. Como el tiempo de cocción es largo (casi dos horas), lo ideal es usar toda la mezcla porque tiende a caerse si se deja reposar y el resultado no es el mejor. Yo uso dos latas rectangulares de horno convencional.

-La clave: la temperatura debe ser baja, unos 100°C. Tengo la ventaja de que mi horno es eléctrico y puedo regular la temperatura. Sin embargo, si el horno es a gas y la temperatura mínima es de 120°C se puede hornear con la puerta entre-abierta para evitar que los merengues se quemen. Los míos quedan crujientes y un poco caramelizados. Si desean merengues mas blanditos en el centro, hay que bajar aun más la temperatura (unos 80-90°C) y prolongar el tiempo de horneado.

-Cuando haya pasado el tiempo de horneado, apagar el horno y dejar que se enfríen completamente dentro de él. Si se sacan una vez apagado el horno, hay riesgo de que se caigan. Más que hornearlos lo que se hace es secarlos y por eso se usa temperaturas tan bajas. Eso sí, antes de apagar el horno, verificar que no estén muy blandos. Para saber si ya están listos, intentar despegar un merengue. Si éste se desprende facilmente y está firme por debajo, es señal de que se han secado por completo. Cuando pongo dos bandejas, que es lo que siempre hago, algunas veces los merengues de la bandeja inferior demoran un poco más en secarse. Entonces, verifico que los merengues de la bandeja superior estén secos y los cambio de posición para que los de abajo tengan chance de secarse.

-Si desean merengues súper blancos, evitar usar esencia de vainilla para darles aroma. Eso sí, verificar que la esencia a usar no sea a base de aceite. Y bueno, por supuesto, se puede usar colorantes artificiales o naturales para darles color.

-Los merengues se conservan muy bien por un par de semanas si se guardan en una lata hermética. Los podemos comer tal cual o, por ejemplo, untarlos con mermelada, dulce de leche, crema. También son la base para hacer la famosa Pavlova, el Merengón colombiano y otros postres franceses como el Vacherin.

Pero bueno, no los atormento más. Con todo este discurso van a creer que es de lo más difícil y, al contrario, los merengues franceses no tienen mucha ciencia. Pero todo esto es el resultado de mi experiencia y la verdad, una gran ayuda para facilitar la tarea.

Merengues franceses

Ingredientes:

 

-3 claras de huevo 
-1 pizca de crémor tártaro (aproximadamente la punta de una cucharadita de café) 
-100 gramos de azúcar común 
-80 gramos de azúcar glas o impalpable 
-1 cucharadita de esencia al gusto 
-Grageas de colores (opcional)
-Una manga pastelera y boquilla (opcional)

1. Forrar con papel manteca dos latas rectangulares. Precalentar el horno, calor arriba y abajo, a unos 100°C.

2. Poner las claras en el bol y empezar a batir a velocidad media. Cuando empiecen a espumar, sin dejar de batir, agregar el crémor tártaro o las gotas de limón.

3. Añadir el azúcar glas y seguir batiendo a velocidad media.

4. Parar la batidora y agregar la esencia.

   
5. Empezar a batir y dejar caer lentamente el azúcar común. Comenzar a batir a velocidad alta (unos 6 minutos). Si es necesario, parar la batidora y bajar con una espátula la mezcla que se pegue a las paredes del bol.

6. Cuando tengan la textura de la foto, es decir, cuando se formen picos firmes, dejar de batir. Ya tenemos la mezcla lista. Podrán voltear cuidadosamente el bol y verán que la mezcla quedará pegada a las paredes.

7. Poner una manga pastelera con una boquilla en un vaso alto y llenarla con la mezcla. Pueden usar cualquier tipo de boquilla, lisa, de estrella y del tamaño deseado. Recuerden que el tiempo de secado puede variar dependiendo del tamaño de los merengues. Si no disponen de manga pastelera, también pueden usar una cuchara para poner pequeñas cantidades de mezcla y darles la forma deseada.

8. Hacer las formas en la placa tratando de que queden del mismo tamaño.

9. Poner unas grageas o pepitas. Yo usé azules, blancas y rojas.

10. Y lista la placa para ir directo al horno por unos 60 minutos a 100°C. Pasado este tiempo, bajar la temperatura a 80°C y dejarlos unos 45 minutos más. Verificar que los merengues no estén blanditos antes de apagar el horno y dejarlos dentro hasta que éste último se haya enfriado completamente.

Y listos los merenguitos,

 Muy “bleu, blanc, rouge” como la bandera francesa.

Et vive la France !

Galletitas Minions

Sé que he estado algo inactiva con el Blog últimamente. Ofrezco mis disculpas. Pero tengo la excusa de que estamos en verano y que es una época en la que uno vive ocupado fuera y disfrutando del calor. 

Aunque por estos días el calor es realmente intenso y eso me da la excusa de no querer encender el horno para hacer tortas o cupcakes. Sin embargo, ¡hoy les traigo un paso a paso de unas galletitas de Minions que no es necesario hornear! 

Y ahora, no hay excusas para hacer un post y encima con el estreno de la nueva película de estos muñequitos amarillos que nos encantan a todos. En casa, somos fans de los Minions desde el más grande hasta la más chica que se divirtió haciendo estas galletitas y se ha divertido mucho más comiéndolas porque esa es la mejor parte de ayudarle a mamá.

Los ingredientes y materiales son fáciles de encontrar. Para el cuerpo de los Minions, usé unas galletas que se llaman “Lenguas de gato” pero pueden usar unas que se parezcan y que sean fáciles de encontrar en sus países. Usé chocolate blanco y le puse colorante amarillo. Pueden comprarlo ya amarillo en forma de pastillas (los famosos Candy Melts) o usar, como yo, chocolate blanco con colorante. Ojo: los colorantes para chocolate son especiales y a base de aceite. Los colorantes normales no dan buenos resultados en el chocolate. Entonces, mejor usar del que viene ya con el color necesario.

Si hace mucho calor como aquí en estos momentos, les recomiendo mantener las galletas ya decoradas en la nevera para que el chocolate no se vaya a derretir.

Material:

-Chocolate color amarillo o Candy Melts amarillos 
-Galletas tipo deditos
-Chispas de chocolate
-Ojitos de dulce
-Fondant azul y negro
-Polvo comestible color plata (opcional)
-Rodillo
-Pincel
-Agua o pegamento comestible
-Un cortador redondo pequeño (o una boquilla para glaseado) y un pedazo de pitillo
-Marcador negro de tinta alimenticia
-Bisturí

1. Derretir el chocolate al baño maría o en el microondas. Con un tenedor, sumergir las galletas en el chocolate y cubrirlas completamente. Darles un golpecito para quitar el exceso de chocolate.

 

2. Con un cuchillo, ponerlas delicadamente en una bandeja con papel de hornear. 

3. Antes de que el chocolate se endurezca, poner las chispas de chocolate para hacer el cabello de los Minions. Poner las galletas en la nevera para que el chocolate termine de endurecerse.

4. Para hacer las gafas, extender el fondant negro y hacer un círculo con una boquilla o un cortador redondo. Con un pedazo de pitillo o un cortador redondo pequeño, hacer un segundo círculo para hacer una especie de aro. Con un poco de agua o pegamento comestible, pegar el ojito dentro del aro de fondant.

5. Este paso es opcional. Para darle brillo a la gafas, mezclar polvo plateado comestible con un poco de vodka y pintar alrededor de los ojos con un pincel. El vodka se evapora rápidamente y no hay problema para que los niños consuman las galletas.

6. Cuando el chocolate haya endurecido es hora de decorar las galletas. Extender fondant negro y cortar tiras para crear el soporte de las gafas. Y con fondant azul, hacer la ropita de los Minions. Fijar todo con agua o pegamento comestible.

7. Pegar los ojitos con un poco de chocolate y dibujar la boquita con un marcador negro.

Y listos nuestros Minions,

  
¿Verdad que son lindos? Y como ven, nada difíciles de hacer. Una buena opción para ocupar a los niños en estas vacaciones.

Y bueno, solamente nos queda sacar el día para ir a ver la peli. El problema es que hace tanto calor que sólo dan ganas de ir a piscina y de montar en bicicleta.

Feliz verano!!!